La Historia de Mamello
La voz de los jóvenes
Me llamo Mamello Fosere y soy de Lesotho. Nací en 1979 en el hospital Scott. Estoy en un pueblo llamado Tanka en el distrito de Mafeteng. Vivo con mi madre, dos hermanas y tres hermanos. Mi padre murió en 1992.
Mamello fue invitada a participar como facilitadora en el seminario de Swaziland en Marzo de 2000, organizado por Save the Children (SC-UK). El objetivo del seminario era reconsiderar el apoyo de SC-UK a los programas de rehabilitación basada en la comunidad (CBR) en 22 países. SC-UK tenía especial interés en alentar a jóvenes discapacitados a formar parte del proceso de reconsideración y a tener un rol activo como facilitadores en el seminario.
Mamello se hizo conocida en su comunidad como “la pequeña señora”, tenía un tipo severo de fragilidad ósea. Fue alentada por el equipo CBR del hospital Scott a asistir a la escuela de la zona. Sin embargo, mucho antes de que se le otorgara una silla de ruedas y un lugar en la escuela, ella fue educada en su casa por sus amigos. Más adelante, miembros de la comunidad organizaron la reconstrucción de la calle para que Mamello pudiera ir a la escuela en su silla de ruedas sin el riesgo de una fractura.
Mamello relató su historia a los participantes del seminario y juntos la editamos para Enabling Education. Tiene recuerdos felices de la escuela primaria, pero la secundaria fue mucho más difícil.
“Mi mejor amiga me enseñó a leer y escribir en casa, solíamos jugar juntas todo el tiempo. Jugábamos con muñecas y yo le enseñaba a mis amigos a coser la ropa y a tejer. Creamos un coro y muchos niños se sumaron. Los maestros de la escuela primaria de Tanka nos visitaban y me daban algo de tarea.”
Comencé la escuela en 1994, a la edad de 15 años, en el quinto nivel. Los maestros y los otros chicos me cuidaban en la escuela. En esa época la escuela me gustaba mucho. Podía ayudar a mi maestra a enseñarles a los otros y eso me ayudaba a saber más cosas y a recordarlas todo el tiempo. Pude pasar del quinto nivel al sexto en el primer lugar y primera clase en el séptimo nivel (el último año de la escuela primaria).
Cuando terminé la escuela primaria en 1997, fui a un internado en Motsekuoa.
No me había inscripto para esta escuela porque escuché que no se trataba bien a los alumnos de A (primer año). Fue entonces cuando me enteré que tenía un lugar en Motsekuoa. Sentía que era mejor no asistir a la escuela, pero mi amiga me dijo que ella me cuidaría. La organización de padres, LSMHP, pagó mis cuotas escolares durante los tres primeros años. No me trataban mal, pero me tenía que despertar muy temprano todos los días.
Algunos maestros no me golpeaban cuando no podía responder sus preguntas o desaprobaba sus materias, pero otros lo hacían. Cuando entraban a la clase yo no estaba pensando en sus materias, sino en cómo me golpearían cuando no pudiera responder sus preguntas.
Algunos niños se hicieron mis amigos, mientras que otros me llamaban de cualquier forma. Yo le decía a los maestros y ellos los golpeaban y les decían que no lo volvieran a hacer.
A veces otros niños, que no eran mis amigos, me llevaban al baño y me ayudaban a subir a la silla de ruedas. En 1998 tuve un problema con mi amiga que me cuidaba. Quedó embarazada y dejó la escuela. Pero yo tenía otra amiga que también era discapacitada y hacía las mismas cosas que mi primer ayudante. Pero también tuve un problema con ella. No pudo terminar la escuela porque no tenía dinero suficiente para pagar las cuotas. Yo pasé a C (el tercer año de la escuela secundaria) en segunda clase, pero quedé fuera de la escuela porque mi madre no podía pagar mis cuotas escolares y las de mis tres hermanos y hermana.
Mi intención es finalizar la escuela secundaria y hacer trabajo social y ayudar a otros niños con discapacidades.
Nos entristece informar que Mamello murió de neumonía cuatro meses después del seminario. Su valor y determinación aún perduran en la comunidad Tanka y más allá. Fue una verdadera pionera.